Pautas éticas para el desarrollo de actividades de investigación y extensión en Universidades
Elaboradas en el Marco de la RECyT-UNLa por la Lic. Patricia Varela y consensuadas con el equipo de trabajo RECyT-UNLa.
Introducción
Una Universidad urbana comprometida es aquella que, entre otras cosas, prioriza la articulación y cooperación entre los múltiples actores del proceso social de producción del saber, trasformando información en conocimiento, atendiendo a demandas comunitarias regionales y nacionales, incorporando a los sujetos de investigación en calidad de colaboradores activos de los proyectos a desarrollar.
A partir de este reconocimiento se pone de manifiesto la relevancia de contar con pautas éticas básicas para la orientación de los proyectos de investigación y extensión en la Universidad sustentadas en prioridades científico-tecnológicas acordes a intereses comunitarios y al respeto de la dignidad y derechos de las personas, su historicidad y sus valores; al cuidado responsable del medio ambiente y a la incorporación del entorno socio-cultural de los sujetos en sus aspectos socio-culturales, políticos y productivos.
Precisamente, es tarea de los Centros de Investigación y las Redes que explícitamente tematizan la ética de la investigación asumir el desafío de elaborar pautas éticas mínimas para ser difundidas, discutidas y desplegadas en diálogo con la comunidad universitaria, asesorando en todo momento a docentes, investigadores y estudiantes y propiciando un intercambio fértil que permita potenciar esfuerzos y medios materiales, organizando actividades para generar y sistematizar conocimientos, ya sea, en el nivel de investigación básica o aplicada, de desarrollo experimental, implementación tecnológica, difusión y transferencia de resultados.
En referencia a la participación de la comunidad universitaria en el debate en torno a la ética de la investigación es importante garantizarlos intereses comunes y la relevancia regional del saber aún por sobre los intereses académicos. Las prácticas pre-profesionales, y la investigación de grado y pre-grado son áreas de interés preferencial para establecer ejes comunes en función de pertinencias locales que orientarán los quehaceres y deber-ser de los investigadores e investigadoras en formación. La agenda política en investigación no está aislada de este colectivo y no debe permanecer ajena a la calidad ética de sus producciones. Los proyectos de investigación, pero también las tesis y tesinas de grado y de posgrado, deben entenderse como producciones que dialogan con la comunidad y generan responsabilidades hacia ella, correspondiéndose además un compromiso recíproco en la democratización de los saberes, desde la definición de los temas a trabajar hasta su transferencia y aplicación.
Presentamos a continuación un decálogo que presenta pautas fundamentales para orientar la investigación ética y socialmente comprometida y que requiere sin duda ser desplegado en diálogo con la comunidad universitaria en su conjunto:
ASPECTOS ÉTICO-AXIOLÓGICOS. El respeto por los valores, principios e intereses de la comunidad en todas sus esferas (territorial, económica, ambiental, histórica, cultural, biológica, científica, y otras) debe estar presente de modo explícito en todas las etapas de la investigación, evitando su neutralización. Esto es posible a través del diálogo permanente.
ASPECTOS ÉTICO-METODOLÓGICOS. Todo proyecto debe establecerse sobre bases metodológicas firmes y correctas. Por lo tanto se requiere una revisión cuidadosa del diseño metodológico preferentemente en forma conjunta con la revisión ética, dado que no es ético realizar una investigación que presenta errores formales.
VALIDEZ CIENTÍFICA. La investigación debe aportar conocimientos nuevos y válidos sobre la base de una información cabal del estado del arte y con un adecuado manejo del marco teórico de referencia.
IMPACTO SOBRE LAS PERSONAS. El desarrollo de la investigación afecta tanto a personas como a comunidades y por lo tanto es necesario seguir estrictamente tanto las normas éticas nacionales como internacionales que brindan el sustento elemental para reducir los riesgos de daño. Este marco deontológico contempla entre otras cosas, la necesidad de contar con un consentimiento informado para poder realizar investigaciones que involucren activamente a las personas.
CONFIDENCIALIDAD DE LA INFORMACIÓN. La intimidad y el anonimato de los sujetos participantes en calidad de colaboradores debe ser resguardada tanto durante la investigación como con posterioridad a la comunicación de sus resultados. Los datos, fotos, archivos audiovisuales, y documentos personales, deben utilizarse responsablemente y siempre con el consentimiento de las personas.
CONFLICTOS DE INTERESES. Toda vez que se conozca un interés que ponga en riesgo la integridad de la investigación o de las personas relacionadas con ella, este debe ser declarado explícitamente durante todo el desarrollo del proyecto, elaborando además una estrategia para su eliminación o regulación. Merecen especial atención las investigaciones que, realizadas en universidades, tienen a estudiantes como objeto de estudio.
MANEJO DE LOS DATOS Y RESULTADOS. Es importante mantener estrictamente la fidelidad y la integridad de los datos. Se debe observar la idoneidad de su interpretación mediante la incorporación de un sustrato conceptual adecuado para que se conviertan en información válida e idónea. Cuando se trate de datos sensibles vinculados a cuestiones médicas, económicas, sociales o ideológicas de fuentes diversas – pertenecientes a personas, grupos, o colectivos varios- se deben extremar los cuidados tanto en relación a su almacenamiento así como a la reserva de las fuentes si esto fuera necesario.
ENSAYOS AMBIENTALES. Se requiere tomar recaudos que promuevan el cuidado de la naturaleza sistemáticamente degradada por la aplicación del paradigma productivo capitalista en términos de pertenencia al modelo civilizatorio hegemónico. En consecuencia, surge la importancia de implementar medidas tendientes a modalizar las prácticas dominantes, orientándolas hacia el compromiso social mediante la racionalización y el cuidado de los recursos naturales durante la investigación.
EMPLEO DE ANIMALES Y MUESTRAS BIOLÓGICAS. Está justificado únicamente en el caso que no se pueda arribar al conocimiento esperado por otros medios. La investigación con animales no humanos debe realizarse siempre respetando las pautas establecidas en las normativas éticas específicas tanto nacionales como internacionales.
CONSIDERACIONES ESPECIALES PARA LAS INVESTIGACIONES SOCIALES. Es de la mayor importancia evitar enfoques centrados exclusivamente en la autonomía abstracta de los individuos y también aquellos etnocéntricos en los cuales las alteridades y las tramas de las diversas formas de vida no son consideradas como áreas sensibles que merecen ser respetadas en su singularidad y en su particular modo de producir saber.
Lic. Patricia Varela
Para acceder a la versión extendida , haga “click” en el siguiente enlace: